Asignatura: Principios de Hotelería y Turismo
Docente: Lic. Ralph Jurado Taipe
I UNIDAD
Semanas 2-3-4
Evolución histórica de los viajes en el mundo
Docente: Lic. Ralph Jurado Taipe
I UNIDAD
Semanas 2-3-4
Evolución histórica de los viajes en el mundo
1.1 Introducción y antecedentes básicos
El fenómeno del turismo tal cual lo conocemos hoy es un hecho enteramente nuevo en el mundo, pues data desde mediados del siglo pasado hasta el presente. Para decirlo con más precisión el turismo comienza con el primer agente de viajes: al señor Thomas Cook. Con ello queremos señalar que el turismo es una actividad decididamente contemporánea, producto y consecuencia de la civilización actual y del desarrollo industrial que se origina con el logro de conquistas sociales, técnicas y políticas fundamentales en el siglo XX: Las ocho horas de trabajo y las vacaciones anuales pagadas antes consideradas como delirios de la clases trabajadora; el libre tránsito y circulación de las personas dentro de un país y fuera de él como consagra la Declaración de los Derechos Humanos; el desarrollo vertiginoso de los transportes y la organización de los viajes como un producto.
El comentario anterior pretende pues, esclarecer que la historia del turismo no es en modo alguno la historia de los viajes puesto que no son paralelas por haberse producido en épocas diferentes. Sí podemos decir que la historia de los viajes es en cierta manera pionera al turismo actual por haberse producido dentro del ella algunas características que han contribuido al mejor estudio y comprensión del turismo moderno.
“Se puede viajar sin hacer turismo, pero no se puede hacer turismo sin viajar” es un viejo principio que establece la diferencia entre una idea y otra. Con seguridad no se hace turismo cuando se viaja por razones de trabajo, migratorias, catástrofes naturales o rumbo al exilio por causas políticas entre otras. Contrariamente, Se hace turismo con el requisito natural de viajar, desplazarse por motivos pacíficos, de recreación, vacaciones, tiempo libre, descanso y aún para estudiar o hacer negocios.
La historia de los viajes, durante dieciocho siglos y medio, ocurrieron desplazamiento de personas fuera de su residencia habitual por distintos motivos, entre de ellos de índole cultural, comercial, curiosidad, salud, política o religión; cabe mencionar también los viajes de conquista, expediciones, luchas militares, la emigración masiva de pueblos enteros, viajes forzados de esclavos, condenados la exilio. Claro esta que esto no es el pasado del turismo ya que aquí hubo destrucción, violencia y muerte. Para nosotros en la actualidad tenemos claro que el turismo es símbolo de paz y entendimiento entre las naciones, con seguridad diremos que el turismo es un vehiculo de desarrollo y progreso.
Con lo antes mencionado podemos notar una inmensa diferencia del turismo moderno con lo referente a los viajes del pasado. Para comprender mejor el fenómeno del turismo es preciso conocer las razones, causas, motivaciones de los viajeros de antaño. Pero eso si con referencia a los viajes efectuados por hombres libres que viajen por propia voluntad y con fines esencialmente pacíficos.
La diferencia sustancial del turismo moderno con los viajes del pasado, comprende en toda su magnitud el fenómeno actual es preciso conocer las razones, causas, motivaciones de los viajeros de antaño, haciendo una primera advertencia: solo nos referimos a los viajes efectuados por hombres libres que viajan por propia voluntad y con fines esencialmente pacíficos.
1.2 La Edad Antigua
Periodo: Desde los albores de las sociedades organizadas hace 6000 años hasta la caída del imperio Romano de occidente por los bárbaros, año 476 de nuestra era.
Mundo Conocido: Tierras bañadas por el mediterráneo o próximas a él, Europa Central, Mesopotamia, Arabia, Irán, India hasta el Ganges y China. Se tenían noticias inciertas y hay veces fantásticas de otros territorios de Europa Asia y del interior de África.
Las principales motivaciones de los viajes:
Interés Político
La época en la que nos situamos permite advertir que la conformación de grupos humanos organizados desde pequeñas tribus hasta los grandes imperios como Fenica, Grecia, Roma, Egipto, requerían relacionarse entre si par pactar acuerdos, alianzas, sean de expansión, defensa o de simple coexistencia. Por ello los gobernantes de entonces dirigían a sus emisarios y embajadores hacía otros estados con el objeto de incrementar sus relaciones de dominio.
Este tipo de viajeros fue numeroso, no solo por las caravanas que las conformaban sino por la frecuencia con la que se producían.
Interés comercial
Tal vez haya sido esta motivación la de mayor significación en el mundo de los viajes de la edad antigua. Los mercaderes de la época, motivados por ganancia inmensa no dudaron en hacer largos viajes en búsqueda de productos exóticos y codiciados.
Prueba de este espíritu comercial la han dado siempre fenicios y cartagineses y en la misma medida griegos y romanos. Por ejemplo, estos últimos iban a buscar el ámbar (resina) a las costas del báltico, el hierro a lo largo del Vístula (río de Polonia que desemboca en el mar Báltico) el estaño en las Islas Británicas. Los griegos comerciaban en una vasta área que iba desde el mar Negro hasta Marsella. Los árabes se desolazaban hacia Egipto e Italia y hasta se dice que llegaron a la China. Es indudable que estos extensos viajes de avezados comerciantes les dio un panorama nuevo no sólo de los que compraban o vendían sino de las costumbres, idioma, religión, formas de gobernar de los lugares por donde acudían.
Estos intercambios comerciales se hacían en todas las direcciones. Los mercaderes y navegantes se desplazaban en barco por las costas conocidas, las caravanas seguían rutas terrestres casi sin fin a través del mundo conocido.
El deseo de saber o la curiosidad
Las primeras noticias fidedignas de viajes realizados por los griegos pertenecen a Herodoto, conocido como el padre de la historia quien viajo por todo Grecia, hacia menor, Mesopotamia y Egipto en el siglo V a.C. Piteas de Marsella quien partiendo de su ciudad natal se arriesgó más allá de las columnas de Hércules, llegando hasta Gran Bretaña y Escandinavia. Otros exploradores, colonizadores y filósofos viajeros griegos contribuyeron con las incursiones y relatos a ampliar el horizonte geográfico, terrestre y marítimo, y dentro de él, la forma de otros pueblos.
Los personajes antes señalados han sido viajeros célebres que recuerda bien la historia pero no debemos dejar de lado al viajero común y corriente que tuvo dentro de si el deseo universal de saber o la simple curiosidad que inspira conocer más allá de sus linderos.
La religión
La época que nos ocupa vio nacer a muchas religiones, desde la pagana greco-romana hasta la budista, musulmana y cristiana. El sentimiento religioso fue muy profundo, por tanto, motivación poderosa par efectuar largas peregrinaciones hacia los lugares de culto mas venerados. Como el célebre oráculo de Delfos donde acudían multitudes de griegos y extranjeros a consultar a la Pitonisa sobre su destino; los chinos adeptos a buda iban hasta la india recorriendo miles de kilómetros. Y en estas largas marchas, los viajes se incrementaron día a día.
El famoso San Pablo, el gran viajeros de la religión cristina; es un caso de estas jornadas llevando el mensaje de Cristo desde Palestina hasta Grecia, Roma y el oriente.
Los deportes
La edad antigua fue también bastante prodiga en la actividad deportiva de gran envergadura como los juegos olímpicos que se llevo acabo por primera vez en Grecia en el año 776 a.C. en el monte de Cronos.
Lo trascendental es que se desarrollaron hasta el año 393 d.C. (fueron suprimidos por el Emperador Teodosio), es decir, unos 12 siglos, lapso en el cual tanto deportistas como público en general acudían de todo el mundo conocido para competir o sencillamente observar.
“El ideal olímpico fue extendiéndose con mayo ímpetu cada vez; saltando de los puramente local a lo panhelénico, y con la conquista romana, a lo universal.
La Ley de la Hospitalidad
Gracias al derecho consuetudinario, es decir el que se genera por la fuerza de la costumbre, la ley no inscrita de la hospitalidad era bastante conocida y admitida por los pueblos antiguos y fomentada por sus religiones. Consistía en la generosidad de las autoridades locales en ofrecer a os viajeros que llegaban, toda asistencia y protección necesarias durante su permanencia; la solicitud de hospitalidad de los forasteros no podía ser rechazada. Con el tiempo la actitud hospitalaria se convirtió en toda una institución que germinó en Grecia, Fenicia y Egipto y más tarde en Roma.
Merced al desprendimiento de hombres de buena voluntad el viaje y los viajeros podían ser realizados en situaciones menos adversas y peligrosas para atravesar nuevos países y descubrir nuevas gentes.
1.3 La Edad Media
Periodo: Siglo V de la era Cristiana y mediados del siglo XV, toma de Constantinopla por los turcos en 1453.
Mundo conocido: Europa Occidental, Europa Central, Asia, China y el Tibet, India, Persia, África, Hasta Guinea y Groenlandia.
Las principales motivaciones de los viajes.
Vale la pena señalar en primer lugar que la edad media fue una época desde el punto de vista política y social caótica, pues innumerables pequeños reinos y estados luchaban por sobrevivir ante la amenaza bárbara en toda Europa y otros se dedicaban a coexistir en alianzas.
El feudalismo, la burguesía y las cruzadas son los elementos que explicaban el porqué de los constantes viajes de miles de personas no obstante la peligrosidad e inseguridad de los caminos.
Aparecen así entonces:
a. Las misiones de los embajadores.- De grandes y pequeños reinos que se desplazaban constantemente para pactar acuerdos de intereses políticos mutuos y se dirigían a países muy lejanos como la comitiva que envió “Carlomagno al Califa Haroun-al-Rachid el año 797, la del papa a la alejada y misteriosa Mongolia en el año 1246.”
b. Los mercaderes.- Se convirtieron muy pronto en los nuevos ricos, cuyos viajes de comercio siguieron siendo una parte del gran movimiento de viajeros de la época. Sus viajes cada vez más frecuentes y sus productos cada vez más diversos hicieron nacer las grandes ferias y ciudades como Venecia, Génova, Pisa y Marsella entre otras. A través de Constantinopla y e los puertos del Mediterráneo oriental empezaron a fluir numerosas mercancías: alfombras, tapices, porcelanas, etc. Luego aparecieron comerciantes terrestres que llevaron por toda Europa continental hasta las costas del mar del norte la infinidad de objetos de lujo y boato ya imprescindibles de las cortes feudales, más suntuosas de antes.
Los grandes descubrimientos geográficos y de nuevas rutas ayudaron a incrementar el comercio con mayor intensidad pues las nuevas clases descubrieron que eran dueñas de una arma de tremenda eficacia: el dinero.
No podemos dejar de mencionar a un navegante y explorador veneciano de renombre: Marcopolo quien hizo extraordinarios relatos de un país fantástico y que vio con sus propios ojos, la China. Este hombre hizo una gran contribución cultural a Europa gracias a sus lejanos viajes por el oriente.
c. Los peregrinos.- Durante la edad media, la religión cristiana en particular, tuvo un auge tremendo que motivo que millares de creyentes se dirigiesen a todos los lugares de cultos como: Roma, Santiago de Compostela y Tierra Santa y ser peregrino por lo menos una vez en la vida.
Fue tal el movimiento de peregrinos por Europa que el papa Alejandro III en el año 1300 declaró año del jubileo para quienes visitases el templo de Santiago el Apóstol, ganando con ello indulgencias penas y conmutaciones de votos, es decir, tenían casi asegurada su estancia en el cielo.
Se dice que los peregrinos dejaron en Roma un verdadero “río de oro”. Las carreteras que llegaban hasta santiago estaban provistas de albergues y hospicios. Los que marchaban hacia Jerusalén hacían su viaje sin prisa, tomándose semanas meses o años y se desviaban con frecuencia para admirar devotamente reliquias y monasterios.
El peregrino, en aquel entonces tenía la ventaja de estar protegido por la iglesia con las ordenes religiosas, las recomendaciones de sus soberanos y señores, por eso es que los conventos y las parroquias tenían “hospicios” donde los peregrinos pobres encontraban alojamiento y comida gratis.
d. Los estudiantes.- Una nueva motivación de los viajes surgió en la edad media con los estudiantes, pues siendo una élite de las clases aristócratas encontraron en las grandes universidades europeas como las de Bolonia, París, Salamanca, Oxford, Cambridge o Roma la respuesta a las innovadoras inquietudes que cuestionaban a la escolástica, la teología y la alquimia. Se buscaba la verdad en la observación directa, surgiendo la ciencia experimental y abriendo paso al renacimiento.
Los estudiantes no escatimaban esfuerzo para ir a escuchar a los grandes maestros y por ello viajaban en compañía de sus séquitos por Europa.
La Libre Circulación de los Viajeros.- Precisamente en esta época nace uno de los valores más preciados del hombre, más adelante consagrado en la declaración universal de los derechos humanos: la libre circulación de las personas. Algunos estados, entre ellos cristianos y musulmanes, mediante tratados expresos garantizaban a los peregrinos, estudiantes, navegantes y mercaderes, la seguridad y libertad de circular en sus territorios.
No obstante que viajar en una época de constantes luchas políticas era muy peligroso, la ley de la hospitalidad que ofrecían protección y asistencia religiosa y de abrigo hacía menos adversa las condiciones de los desplazamientos.
1.4 La Edad Moderna
Período: Esta edad abarca desde la caída de Constantinopla en el poder de los Turcos en 1453, o desde el descubrimiento de América según otros autores hasta la Revolución Francesa, 1789.
Mundo Conocido: Casi todo el planeta.
Las principales motivaciones de los viajes
El marco social y político de aquella época relacionado con los viaje podemos resumirlo señalando que es la edad de oro de los grandes descubrimientos geográficos, como consecuencia de ello el desarrollo comercial de los grandes monopolios. Paralelamente se consolidad nuevos Estados e imperios coloniales poderosos como España, Inglaterra y Francia gracias a las nuevas rutas y a las riquezas que obtenían de los nuevos territorios conquistados.
El sentimiento religioso de la edad media es conmocionado por el surgimiento de la Reforma y las guerras de religión que ocasionan un cambio radical en las peregrinaciones, pues paulatinamente comienzan a desaparecer, agregándose la inseguridad en las rutas, causada por pillos y asaltantes.
El Renacimiento y el Humanismo provocan una nueva actitud en el espíritu de los europeos en las artes y ciencias, las mentes cultivadas adoptan un nuevo concepto de la vida, por lo tanto ante el mundo que los rodea, En estas circunstancias aparece una mayor y amplia corriente de viajeros.
Los Estudiantes
El nuevo amanecer intelectual genera en la clase dominante nobles y nuevos ricos, una profunda inquietud por conocer, saber e incrementar sus conocimientos en las universidades de prestigio como: Oxford, Salamanca y Bolonia. Se convirtió entonces en algo imprescindible para los jóvenes inglese perfeccionar su educación viajando por el contienen europeo, mas tarde imitando por la elite de toda Europa. Así es como los estudiantes iniciaron el ”petit tour”, pequeña vuelta que comprendía el sudoeste de Francia y el “grand tour”, gran vuelta que incluía el sudoeste, el sur, el sudeste de Francia, la Borgoña e Italia.
Un gran acontecimiento acompaño a los estudiantes europeos: la aparición del pasaporte. Específicamente los ingleses para salir de su país y trasladarse al continente necesitaban embarcarse y pasar al puerto, nace así el passport como documento necesario para pasar las fronteras de los nuevos Estados y ciudades.
Por más de 300 años, hacer el “grand tour” fue muy frecuente. Los estudiantes, en general, iban acompañados por sus tutores y sirvientes quienes se encargaban del transporte - la diligencia en aquel entonces -la alimentación y el alojamiento.
Sobre esto último, debemos remarcar que los antiguos hospicios de la edad media que ofrecían abrigo y comida en forma generosa, desaparecieron completamente para dar paso a los primeros albergues que ofrecían a lo largo de las rutas un lugar donde dormir y comer a su huéspedes.
Se crean así los primeros servicios remunerados de alojamiento dando inicio al desarrollo de la pequeña y gran hotelería que hoy conocemos.
Tal era la importancia de estos viajes que,
“no se considera perfecto el que no ha pasado una temporada en Francia, ejercitándose y aprendiendo el idioma, aunque uno haya recorrido todo el mundo, es casi un mal necesario permanecer algún tiempo en el citado reino.”
Los Primeros Viajes Individuales de Placer
Es absolutamente cierto que el Renacimiento causó un esplendor cultural de primer oren reflejado en la pintura, música y arquitectura, entre otras actividades.
Las grandes ciudades y capitales europeas, de pronto, se convierten en atractivos por la fastuosidad de su cortes, como la de Versalles, por sus grandes monumentos, Roma, por ser gran centro cultural, también París. En un medio donde la revolución intelectual del Renacimiento era una forma de vida para las clases cultivadas, era natural la aparición de un nuevo grupo de viajeros que concurrían a lugares conocidos por su propio gusto, por curiosidad o para instruirse.
Aquellos se multiplicaron de tal manera que en 1672 Monsieur de Saint Maurice escribe el libro “ La guía Fiel de los extranjeros en viaje por Francia para considerar las bellezas, para aprender la lengua y hacer sus ejercicios.” Esta primera guía turística contenía las carreteras que conducen a París y las ciudades a lo largo de ellas, describe la capital francesa y “todos los lugares de placer situadas alrededor de la ciudad” también hace referencia ala pequeña y gran vuelta de los estudiantes.
Como se puede advertir, estos primeros viajes individuales de placer, constituyen los albores reales del turismo que conocemos. Algunos tratadistas han señalado ha esta época como la del “Turismo Feudal” que si bien nos corresponde históricamente ala Edad Media, si marca los inicios del turismo actual.
Es así como las palabras “turismo” y “turista” originalmente pertenecientes a la lengua inglesa, fueron tomadas en Francia por el escritor Stendhal cuyas primeras obras fueron libros de viajes y críticas, entre ellas, Memorias de un Turista, en el que designaba como tal a “cualquier persona que hacía un viaje por propio gusto, es decir, como viaje de placer”.
1.5 La Edad Contemporánea
Periodo: Desde la revolución Francesa hasta el presente.
Mundo conocido: Todo el planeta.
Nacimiento y desarrollo del turismo.- La edad contemporánea es la verdadera cuna del turismo, pues en ella se produce sus reales causas, características, evolución y desarrollo pleno ya no como una actividad reservada a una clase privilegiada sino a una demanda gigantesca que se incrementa anualmente por motivaciones que tienen que ver con el tiempo libre, las vacaciones pagadas, los medios de transporte y la capacidad de compra, fenómenos antes desconocidos.
El profesor Donad Lundberg, en su obra Manual de Organización y Administración de Turismo, introduce la idea de que el turismo actual no hubiera sido posible sin la aparición de la “clase media y un medio de transporte relativamente barato”. Es una muestra inequívoca de que el turismo es un fenómeno reciente, actual y resultante del desarrollo industrial moderno. Nosotros agregamos que no hubiera sido posible el turismo de hoy sin las grandes conquistas sociales y laborales de los trabajadores, la legislación constitucional que ampara derechos al descanso, recreación, y el desarrollo de la cultura en el mundo entero.
Es indudable que existen otros factores decisivos, algunos de los cuales pasaremos a examinar más adelante, pero preferimos destacar previamente los más trascendentales.
a. La invención del ferrocarril.
Para ello conviene recordar que el medio de transporte más conocido hasta la aparición de la red ferroviaria fue la diligencia, cuyas características más resaltantes eran: caros, incómodos y peligrosos por inseguros. Con el ferrocarril se produce un vuelco total en las formas de viajar en primer lugar Por su velocidad, por su capacidad de transporte y por los costos que hacían diametralmente opuesto a la diligencia.
Como los aviones de hoy, el ferroviario disminuyó ostensiblemente el tiempo de viaje, lo hizo más barato dando un número mayor de viajeros. Consecuentemente entre 1870 y 1930, el ferrocarril vivió su época dorada, debido a que no tuvo competencia alguna hasta la aparición del avión.
b. El primer Agente de Viajes y Turismo, el señor Thomas Cook.
Nacido en Inglaterra en 1808, es considerado el “Padre del turismo” por los extraordinarios aportes que hizo desde el punto de vista de la organización de los viajes y de su empresa.
En 1841, hizo su primer trabajo como intermediario o agente, contrató un tren especial en viaje de ida y vuelta entre las ciudades de Leicester y Loughborough, con 570 pasajeros rumbo a un Congreso Antialcohólicos. El 5 de julio de 1841 se realizó el primer viaje organizado del mundo. Su vocación de agente y de empresario innovador hizo que Cook continuara fleteando trenes completos para congresos similares o viajes de placer. Aunque en su primera experiencia no ganó dinero, si ganó otra cosa más valiosa; se dio cuenta del enorme potencial que significaba la venta de viajes organizados, es así como nace la primera agencia de viajes del mundo, la “Thomas Cook and Son”.
Su contribución al turismo se podría resumir de la siguiente manera:
– En 1845 crea el primer itinerario impreso para su clientela que viajaba entre Leicester y Liverpool.
– En 1846 organiza la primera excursión con guías de turismo.
– En 1850 firma contrato con la Great Eastern Railway para la venta de tickets de tren.
– En 1865 organiza el primer viaje “todo incluido” a los Estados Unidos.
– En 1867 inventa el cupón de hotel a precio fijo válido para una noche.
– En 1872 realizó la más espectacular de sus obras: organizó la primera vuelta al mundo que duró 222 días. También creo el famoso “Circular Note”, el actual traveller check.
La Agencia de Viajes que inventó Cook fue después perfeccionada aún más como empresa creativa que encontró en el mercado, un campo ilimitado para vender una oferta concebida para una demanda de clase media europea de la época y, expandiendo su radio de acción hacia la India, Himalaya, Cachemira, a los Estados Unidos y Egipto.
La contribución de Thomas Cook al desarrollo del turismo contemporáneo fue decisiva por que dio inicio a su conducción en forma empresarial y profesional, alejada de la improvisación y la aventura que por desventura hoy observamos en nuestro medio.
A la muerte de Cook en 1893, sus tres hijos continuaron su tarea; actualmente la empresa es propiedad de un gran Consorcio Británico, y posee más de 625 oficinas en todo el mundo.
